La Sociedad Española de Reumatología ha elaborado un Posicionamiento sobre la vacuna frente al virus varicela-zóster en pacientes con lupus eritematoso sistémico.
El lupus eritematoso sistémico (LES) es una de las enfermedades reumáticas autoinmunes sistémicas más frecuentes, estimándose una prevalencia en España de 0,21%, lo que podría suponer cerca de 75.000 personas afectadas, según el estudio EPISER. Entre el 20 y el 40% de las personas con LES sufrirán una o más infecciones graves durante el curso de su enfermedad. “A pesar de la alta frecuencia de herpes zóster en los pacientes con lupus, probablemente más alta que en cualquier otra afección reumática, esta enfermedad no está contemplada en las listas de patologías o situaciones en las que las diferentes comunidades autónomas se prestan a financiar la vacuna. De ahí, la necesidad de llevar a cabo un posicionamiento por parte de la Sociedad Española de Reumatología (SER) con el objetivo de instar a las autoridades sanitarias a que contemplen a este grupo de pacientes dentro de la financiación por los riesgos que comporta, evitando así inequidades bien geográficas o generadas por la disponibilidad de recursos económicos”, según advierte el Dr. Íñigo Rúa-Figueroa, coordinador del Grupo de Trabajo en enfermedades autoinmunes sistémicas de la SER (EASSER).
El Posicionamiento SER sobre la vacuna frente al virus varicela-zóster en pacientes con lupus eritematoso sistémico expone la magnitud del problema del herpes zóster en el lupus y los mecanismos que explican su susceptibilidad. Además, revisa, sucintamente, la evidencia disponible sobre la eficacia y seguridad de la vacuna; así como las recomendaciones de otras sociedades científicas en este sentido. Con toda esta información, “se emiten recomendaciones que incluyen la vacunación a todos los pacientes mayores de 18 años, preferentemente en situación de enfermedad controlada o al menos estable o al menos antes de iniciar el tratamiento biológico o inmunosupresor”, determina el especialista.
Tal y como reflejan los estudios, “la reactivación del virus varicela-zóster, en forma de herpes zóster, es más frecuente en el lupus, en comparación con la población general, estimándose una prevalencia en torno al 30%”, recuerda.
En opinión del Dr. Rúa-Figueroa, “se sabe que la vacuna es eficaz y segura en pacientes con lupus, reduciendo el riesgo de padecer zóster y sus complicaciones. Incluso hay indicios que sugieren que podría reducir la incidencia de eventos cardiovasculares, algo que, de confirmarse, sería muy relevante en estos enfermos, que tienen un riesgo aumentado de evento cardiovascular. Por el contrario, si estas personas no se vacunan pueden padecer herpes zóster y éste se puede complicar, bien con neuralgia post-herpéticas o desarrollando formas diseminadas, que pueden resultar mortales”.
En este sentido y en relación con el procedimiento, se insiste en que “lo ideal sería administrar dicha vacuna al diagnóstico de la enfermedad, si es posible en un momento en que la actividad de la enfermedad no sea alta. Se deberían vacunar todos los pacientes con lupus sistémico o, en su defecto, al menos aquellos con historia de haber padecido herpes zóster o que reciban (o sean candidatos para recibir) tratamientos inmunosupresores o biológicos como anifrolumab o rituximab”.
Este documento se encuentra disponible en la página web de la Sociedad Española de Reumatología (SER) o a través de este enlace y cuenta también con el visto bueno de la Federación Española de Lupus (Felupus). En su elaboración, además del Dr. Rúa Figueroa, del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, también han participado las Dras. Josefina Cortes, del Hospital Universitario Vall d’Hebron (Barcelona) y Anahy Brandy, del Hospital Universitario de Cabueñes (Asturias).