V.A. PREVALENCIA E INCIDENCIA

La prevalencia de la gota oscila entre el 0,03% (Nigeria, hombres) y el 15% (Taiwán, aborígenes), con un valor promedio del 1-2% en los países occidentales (12). Su incidencia se estima en aproximadamente un 1 ó 2 por 1.000 (13 y  14). En cualquier caso, es importante tener en cuenta que en los estudios sobre epidemiología de la gota no se aplican los criterios diagnósticos, sino que en la mayoría de los casos las estimaciones se realizan en base a un diagnóstico auto-referido por los sujetos o a partir de datos existentes en bases de datos administrativas –y que pueden variar desde un diagnóstico, a una prescripción de alopurinol, o un valor elevado a de ácido úrico según distintos puntos de corte—, lo que en general muestra baja concordancia con los criterios diagnósticos (15).

La epidemiología de la gota está estrechamente relacionada con la de la hiperuricemia, su principal factor de riesgo. La prevalencia de hiperuricemia se encuentra en torno al 10%; aproximadamente un 10% de los individuos con hiperuricemia desarrolla gota y entre un 80 y  90% de los pacientes con gota tienen hiperuricemia (12).

Algunos autores afirman que se está produciendo un incremento en la incidencia de la gota, aunque la validez de los estudios en los que se basan es baja (16 y 17). De todas formas, dada la fuerte asociación de esta enfermedad con factores de riesgo relacionados con el estilo de vida y con la edad, es lógico pensar que la prevalencia si puede estar en aumento (18).